Sin embargo, cuando se la introdujo en Oriente fue un fracaso comercial. Los ejecutivos de Mathei no podían entender que es lo que pasaba. Para lograr comprender el problema contrataron a un equipo multidisciplinario para que investigara la razón por la que la muñeca de tanto éxito en occidente no se vendía. Al poco de iniciada la investigación dieron con la respuesta. El ideal de la belleza de Barbie no correspondía a la noción que tenían al respecto los orientales. Le hicieron los cambios respectivos y la muñeca se posiciono de manera global. En oriente Barbie es de piernas pequeñas, senos pequeños, cara redondeada y pelo oscuro.
Valorar a una persona a partir de nociones subjetivas es injusto, Valorarte a ti mismo a partir de modelos publicitarios no solo es absurdo sino que además te pone en una situación compleja.
Lo lindo de todo el asunto es que nadie es feo ni bello, es solo una persona con rasgos distintos.
Nadie debería sentirse menoscabado por tener características corporales diferentes a otros. De hecho, somos lo que somos a partir de una conjunción de rasgos que no hemos elegido, sino que son parte de la herencia que hemos recibido.
Ante esta situación tenemos dos opciones, o aceptamos lo que somos, o vivimos permanentemente tristes y amargados, por no encajar en los cánones de belleza que maneja la mayoría influenciada por aspectos externos y subjetivos
Continuará…
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